Luis Revilla y Maricruz Ribera se casaron este sábado
(Boletín).- “Es
bendición Alcalde” le gritaban las personas a los novios Maricruz Ribera y Luis
Revilla que cruzaban el último tramo del puente Los Trillizos, pues sucedió lo
usual en La Paz: una rauda e inesperada lluvia, la cual empapó a los recién
casados. Pero la tradición dice que cuando llueve es una bendición para el
matrimonio.
La
lluvia fue una más de las anécdotas que esta pareja se acordará sobre el día de
su boda. No olvidarán las diferentes muestras de cariño que les obsequió la
población en su recorrido por los puentes que duró una hora y media con el
acompañamiento de una morenada, de bandas de música, mariachis, campanas,
globos, arcos de flores, un oso de peluche gigante e incluso una inmensa
sombrilla con la cual un vecino los cubrió de la lluvia en el tramo final.
Una
hora antes, a las 11:10, se iniciaba el casamiento de la presentadora de
televisión y el Alcalde de La Paz. La ceremonia se realizó en el Jardín Japonés
de Calacoto. Los novios ingresaron a una saliente que da a la laguna, a la
vista de todos los invitados y la prensa.
Rodeados
de árboles y flores el matrimonio empezó con una sencilla bendición del Padre
José María Neuenhofer, fundador de la Fundación Arco Iris, quien les contó a
los novios que en su natal Alemania suelen decir que si uno se casa para ser
feliz no debe casarse, pero sí debe hacerlo si se casa para hacer feliz a su
pareja.
A
las 11:20 se realizó el matrimonio civil, también de duración corta, tras lo
cual los novios hicieron un recorrido para recibir los parabienes de amigos y
parientes. Roto el protocolo, las decenas de periodistas rodearon a la pareja
en el momento del brindis, en el cual un feliz Luis Revilla declaró
públicamente, “ante todos, ante tu familia”, su amor por su esposa.
Maricruz,
cuando le tocó hacer el brindis, explicó que lloraba porque era un momento en
el que le hubiera encantado que esté su padre. “Encontré al hombre de mi vida,
haré todo lo posible para que tengamos un matrimonio ejemplar, donde reine la
comprensión, el amor y la sinceridad”, afirmó.
A
las 11:45 los novios salían del Jardín Japonés rumbo a los puentes Trillizos en
un automóvil descapotable, para realizar la tradicional caminata por los
puentes que realizan los novios que se casan en La Paz. En el puente del medio,
también como manda la tradición, el Alcalde levantó en brazos a su novia e hizo
un corto recorrido con ella a cuestas.
A
las 13:45, terminando en el puente que da a Alto Obrajes, y sin que se detenga
un momento la música de la banda que acompañaba a unos alegres y empapados
morenos, los novios eran despedidos por la gente. Ya con el techo cubierto, el
lujoso descapotable recogió a los esposos en medio de una fuerte lluvia y los
llevó a su fiesta en el Club Tenis La Paz, en Mallasilla.
(Fuente Boletín: Alcaldía Municipal de La Paz)
Foto Internet
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