Felipe Moza sale de la cárcel, después de 5 años y 6 meses
(Boletín institucional).- “Viví seis años llorando por la
justicia sometida al poder, de impotencia porque sin haber sido enjuiciado era
un condenado a estar tras rejas de la cárcel de San Pedro de La Paz, de
sufrimiento al ver como día a día la vida mía y de mis hijos era destrozada, de
dolor porque me impidieron asistir al entierro de mi padre, de pena porque así transcurría
la existencia, pero no tengo rencor ni resentimiento contra nadie”, así resumió
el ex cívico de Villamontes, Felipe Moza el tiempo que vivió como “detenido
preventivo”.
“A todos los que me encerraron
injustamente los perdono desde lo más profundo de mi corazón. No soy hombre de
odios y rencores…., no tengo rencor ni resentimiento contra nadie”, señala.
Ahora parece una cruel anécdota
recordar que en 96 ocasiones fueron suspendidas las audiencias judiciales del
proceso a Moza, postergadas no sólo por ausencias o detalles procedimentales
corregibles sino sobre todo por la decisión política de mantener preso al
chaqueño gracias a varios jueces que para mantener encerrado al chaqueño
forzaron hasta el agotamiento argumentos que sino violaban las normas
establecidas las contradecían
“Son cerca de 2000 días de
encierro sin juicio. Las valoraciones de ciertos operadores de justicia llegaron
al extremo de ordenar se me enmanille a una camilla cuando tuve que someterme a
una operación quirúrgica”, recuerda Moza.
Moza cree que lo encarcelaron por
ser un abanderado de la lucha de una Bolivia autonómica, de las regiones que
aún son invisibles para el estado central, “nuestra lucha fue por salud,
educación, servicios básicos, trabajo y una vida digna para nuestro pueblo”,
indica.
En contraste a otras personas que
fueron liberadas de cargos y persecuciones, Moza recuerda que no tuvo el mismo
tratamiento porque jamás se doblegó al poder, “Nunca traicioné a mi pueblo y a
mis convicciones, nunca traicione mis ideas, ni me vendí”, señala.
Para el chaqueño es paradójico haber
sido encarcelado por pensar distinto en tiempos donde se pregona pluralidad, “la
autonomía es el mejor sistema para construir un futuro con dignidad para los pueblos que siempre
fueron olvidados por el poder. Nada ha cambiado, con una careta de pluralidad e
inclusión se sigue sometiendo a los pueblos, a los humildes, a los indígenas,
como siempre se hizo”, asegura.
“Amo nuestra Bolivia, mi Tarija y
mi Chaco, creo que hay que construir un tiempo nuevo….veo con profundo dolor
que Tarija y el Chaco viven una tragedia, que los millones de dólares generados
no resolvieron problemas básicos como la falta de agua para nuestra gente, siguen
muriendo por falta de médicos, que la población que va al Chaco en bus está
expuesta a la muerte en un camino que es el mismo que nos llevó al frente en la
Guerra del Chaco”, lamenta el ex dirigente cívico.
Sin embargo, Moza pide a los
bolivianos dejar el sufrimiento atrás y ser optimistas porque es tiempo de una mentalidad nueva para Tarija,
el Chaco y Bolivia.
“No es tiempo de resentimientos
ni de odios, es tiempo de esperanza, de fe, de creer, Agradezco a quienes
siempre estuvieron a mi lado, agradezco a quienes nunca me olvidaron, y que
tampoco olvidarán a José Vaca. Agradezco a Dios”, concluyó.
(Fuente de foto y boletín;: Convergencia Nacional)
Felipe Moza, al salir de la cárcel de San Pedro de La Paz
Comentarios
Publicar un comentario